Éxito de los implantes dentales
Osteointegración
Esta página es su recurso de referencia para comprender la osteointegración. Cada sección desglosa un aspecto clave del proceso para ayudarle a aprender paso a paso. Al final de cada sección, encontrará enlaces útiles a recursos adicionales si desea profundizar en el tema.

¿En qué consiste la osteointegración?
La osteointegración es la unión directa y funcional entre el hueso vivo y la superficie de un implante, y desempeña un papel crucial en la estabilidad y el éxito de los implantes dentales. Este fenómeno biológico es esencial para el éxito a largo plazo de los implantes dentales y constituye la base de la implantología dental moderna.
Fuentes: 1, 2.
De la estabilidad mecánica a la biológica
Cuando comienza la cicatrización, la estabilidad mecánica del implante —la estabilidad inicial— disminuye a medida que se produce la remodelación ósea. Los pacientes pueden notar un descenso temporal de la estabilidad en torno a las dos semanas después de la intervención, ya que el apoyo mecánico desaparece y la estabilidad biológica aún no se ha establecido por completo. El tiempo para alcanzar la estabilidad biológica depende de factores como la superficie y el diseño del implante, la pericia del cirujano y las respuestas biológicas del paciente. Los factores de riesgo y el estilo de vida también afectan a la osteointegración, lo que hace que algunos pacientes cicatricen más rápido que otros.
Fuentes: 1, 3.
Osteointegración de implantes y la escala ISQ
La osteointegración de implantes avanza a medida que pasan de la estabilidad mecánica a la estabilidad biológica. Este proceso puede medirse mediante la escala ISQ (Implant Stability Quotient, cociente de estabilidad del implante) de Osstell, que proporciona a los profesionales sanitarios un método fiable y cuantificable para supervisar la osteointegración de los implantes dentales. Mediante la tecnología RFA (análisis de la frecuencia de resonancia), los valores ISQ ayudan a evaluar la integración de los implantes dentales con el hueso circundante para orientar las decisiones de tratamiento y reducir el riesgo de complicaciones como la carga prematura.
Fuentes: 4, 5.

